¡NUESTRO SUEÑO!
Asociación Mexicana de Educadores de
Personas con Discapacidad Visual, A.C.
“Todos los seres humanos somos importantes”
(José R. Romero González, 1985)
Viene de página 1
V. EFICIENCIA VISUAL
El
enfoque
tradicional
dado
a
la
educación
de
los
niños
con
graves
problemas
de
visión
podría
resumirse
de
la
siguiente
forma:
durante
muchos
años
se
pensó
que
las
personas
con
baja
visión,
también
denominadas
como
débiles
visuales
debían
ser
tratadas
como
ciegos
totales,
basando
esta
afirmación
en
la
creencia
de
que
la
visión
debía
ser
ahorrada,
pues
su
uso
podría
ser
perjudicial
para
la
persona
ya
que
aceleraría
el
proceso
de
la
enfermedad ocular.
Por
consiguiente,
se
les
exigía
a
los
niños
con
baja
visión,
funcionar
como
si
fuesen
ciegos,
sin
tener
en
cuenta
para
nada
su
potencial
visual
y
creando
en
ellos
una
serie
de
desajustes
y
de
actitudes
negativas.
Esta
etapa
afortunadamente está superada.
Hoy
está
demostrado
de
una
forma
científica
y
confirmado
experimentalmente
que
el
niño
con
un
remanente
visual,
por
pobre
que
este
sea,
debe
ser
estimulado
para
que
lo
utilice
al
máximo.
Es
decir,
que
la
visión
nunca
puede
ser
ahorrada
o
gastada,
como
se
pensaba
en
épocas
anteriores,
sino
todo
lo
contrario,
cuanto
más
se
utilice,
cuanto
más
se
motive
al
niño
para
que
use
su
visión,
mayor
probabilidad
tendrá
de
obtener
un
mejor
rendimiento
visual.
Y
más
aún,
el
avance
de
la
tecnología
pone
en
este
momento,
más
apoyos
como
ayudas
ópticas
desde
lupas,
telescopios,
amplificadores,
etc.
Pero
a
la
vez
conocimientos
como
el
control
de
la
iluminación, acercamientos de los materiales, contrastes, etc.
Este
cambio
tiene
una
enorme
importancia
y
trascendencia
a
la
hora
de
afrontar
la
educación
de
las
personas
con
discapacidad
visual,
ya
que
más
de
un
80%
de
las
personas
etiquetadas
como
ciegas
poseen
algún
pequeño
resto de visión.
La
eficiencia
visual
puede
definirse
como
el
grado
o
nivel
en
que
la
visión
es
aprovechada
por
la
persona
para
obtener
información.
Es
una
habilidad
que
se
desarrolla
y,
mientras
que
a
las
personas
con
visión
normal
les
basta
la
información
y
estimulación
visual
del
medio
para
desarrollarla,
las
personas
con
baja
visión
requieren
un
programa específico para hacerlo, pues su sistema visual está alterado.
CONCLUSIÓN: IMPLEMENTANDO UNA ESTRATEGIA
En
forma
general,
se
puede
decir
que
es
posible
utilizar
las
cinco
áreas
específicas
en
cualquier
nivel
de
atención,
desde
inicial
hasta
adultos,
haciendo
las
adaptaciones
curriculares
necesarias
para
enriquecer
los
contenidos
de
los Planes y Programas con los elementos de las áreas específicas.
Si
se
trata
de
un
niño
o
adulto
ciego,
no
es
necesario
pensar
en
el
área
de
Eficiencia
Visual,
las
otras
cuatro
las
comparte
cualquier
persona
con
discapacidad
visual,
incluyendo
sordoceguera
y
discapacidad
múltiple,
aunque
en
todos los casos las adecuaciones y programas, deben basarse en sus características individuales.
Por
ejemplo,
en
Educación
Preescolar,
en
el
campo
formativo
de
Desarrollo
Físico
y
Salud,
se
pueden
ubicar
contenidos de Orientación y Movilidad o Actividades de Vida Diaria adecuados a la edad del alumno.
El
objetivo
principal
es
que
a
través
de
los
contenidos
de
las
áreas
específicas
los
niños
con
discapacidad
visual
vayan desarrollando las habilidades y estrategias que les permitirán lograr su inclusión social.
Un
ejemplo
diferente:
con
un
individuo
adulto
cabe
investigar
la
antigüedad
de
la
pérdida
visual
y
sus
experiencias
previas
(escolares,
sociales
y
laborales),
para
dar
prioridad
a
las
áreas
que
favorezcan
más
su
autonomía
perdida
y su rehabilitación, motivándolo para elaborar un nuevo plan de vida.
Referencias:
Hill,
Everett
y
Ponder,
Purvis.
Orientación
y
técnicas
de
movilidad.
Traducción
del
Comité
Internacional
Pro-
Ciegos, México D. F., 1981.
Deficiencia
Visual,
aspectos
psicoevolutivos
y
educativos.
Colección
Educación
para
la
Diversidad,
Ed.
Aljibe,
Málaga, 1994.
Manual de Rehabilitación de la Unión Latinoamericana de Ciegos (ULAC), 2012.
CESE
Orienta.
Revista
de
integración
e
Inclusión
Educativa
Número
1.
Octubre
de
2008
Centro
de
Estudios
Superiores en Educación Xalapa, Veracruz, México
www.orienta.cese.edu.mx
.
Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, ONU, 2006.
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